Él no, pero deciden que sí
No surtió efecto la protesta Ele não (él no) realizada en Puerta del Sol en la que organizaciones de brasileños residentes en Madrid solicitaban no votar a favor del candidato presidencial de la ultraderecha brasileña, Jair Bolsonaro, por considerarlo un dirigente con ideologías machistas.
Bolsonaro se hizo con el 50,2% de los votos en la jurisdicción de Madrid. Le siguieron Ciro Gomes con 17,5% y Fernando Haddad con el 14,5%. En Brasil el panorama ha sido similar, con la mayoría de los votos a favor del candidato del Partido Social Liberal.
Según datos de la Encuesta de Población Activa del Instituto Nacional de Estadística, en España viven 100 mil 596 brasileños, pero solo 20 mil se registraron para votar.
Debido a la delicada situación que vive el país suramericano, las opiniones de la población están polarizadas. Sobre todo con respecto a Bolsonaro. Tal como se evidenció el domingo pasado en la manifestación en Madrid.
En la protesta, los manifestantes entonaban, a todo pulmón, en portugués «una mañana me desperté y resonaba, él no, él no, no, no. Una mañana me desperté y luché contra un opresor. Somos mujeres, la resistencia de un Brasil sin fascismo y sin horror. Vamos a luchar para derrotar el odio, y predicar el amor».
Las mujeres suman un 52% de la población brasileña. La mayoría de los candidatos presidenciales, tomando en cuanta este dato, incluyeron propuestas a favor de las mujeres dentro de su plan de gobierno. Incluso, cinco de ellos propusieron a la vicepresidencia a féminas. Sin embargo, Bolsonaro le restó importancia a este detalle, según consideran grupos feministas.
Bolsonaro es considerado por muchos como la salvación de Brasil y por otros, como los activistas brasileños en España, como una figura de retroceso de los derechos humanos de las mujeres en Brasil, donde a penas el 10% de ellas tienen representación en el Parlamento.