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Cañas y tapas en Olavide

Peatonal y sombreada, la Plaza de Olavide es uno de los lugares con más encanto de Chamberí y una para obligada para aquellos que quieran degustar desde una caña a una buena tortilla de patatas, ya sean vecinos del barrio o turistas.


 

La plaza de Olavide, de forma octogonal a causa de las ocho calles que desembocan en ella, es uno de los lugares más emblemáticos del distrito más castizo de Madrid. Anteriormente sobre ella se encontraba el Mercado de Olavide, construido durante la Segunda República, en 1934, y demolido 40 años después, al final de la etapa franquista. Hoy en día es una plaza arbolada con una fuente y un pequeño parque, circundada por hasta 13 bares diferentes, con sus correspondientes terrazas, siempre abarrotadas los fines de semana.

Cada uno de estos bares, presenta un aspecto diferente y unas características que lo hacen único respecto a sus vecinos. Eso sí, en casi todos ellos podremos encontrar tortilla de patatas con pimientos y ensalada, la especialidad de la plaza. Uno de los mejores lugares para degustarla es el Kybey II, un local con aspécto del típico bar de toda la vida y que anteriormente fue una tienda de ultramarinos. A su lado nos encontramos el Méntrida, donde además de la tortilla, podremos pedir buenas tapas, como chopitos o calamares, e incluso migas y callos los fines de semana. Además, casi todos sus productos son aptos para celiacos.

Plaza de Olavide
Vista de la Plaza de Olavide

Si continuamos caminando por la plaza nos encontramos El 4 de Copas, un buen lugar para pedir unas patatas bravas o incluso donde desayunar una tostada con tomate. A su lado nos encontramos a La Matritense, único bar de toda la capital que sirve vino de producción propia y cuenta con sus propias bodegas. En Casa Puebla, el bar más antiguo de la plaza, ya que se fundó en 1899, destacan las gulas, las alitas y pechugas de pollo, y las tostas de salmón y de ensaladilla, junto con la ensalada Puebla, que incluye bonito, espárragos y pimientos del piquillo.

La especialidad de la Cervecería La Cruz de Malta con los huevos rotos con jamón y el chorizo a la sidra, mientras que las de La Oliva son la empanada gallega, las patatas con cabrales y el lomo gallego o el chuletón de Ávila acompañado de patatas y pimientos de padrón. En este último local encontramos también menús del día con cantidades más que generosas al competitivo precio de 11 euros. Por su parte La Taberna de Olavide nos ofrece un pulpo a la gallega y unos mejillones deliciosos y probar su caldo casero por solo un euro.

La Oliva
La Oliva, exponiendo su oferta gastronómica

Una buena elección para desayunar es la Cervecería Maracaná, donde se pueden consumir porras y churros. Para la hora del aperitivo, lo mejor es decantarse por los boquerones y los calamares. El Bar Arco Iris, otro de esos bares conocidos como «de toda la vida», nos ofrece tortilla, tanto con pimientos y ensalada como en forma de pinchos, y destaca también por sus raciones de pulpo y croquetas, aunque las de calamares y patatas bravas no se quedan atrás.

Aún así, no todo en la plaza se limita al prototipo de «cañas y tapas» y nos encontramos con varias alternativas. Vino y compañía es una tienda de caldos, aunque en ella se realizan regularmente catas de vino y quesos. El restaurante Il Casone está especializado en los productos típicos de la gastronomía italiana como pastas, pizzas y risottos. Por su parte, Mamá Campo tiene una parte de cervecería y otra de restaurante, tal vez con un precio algo más alto que el de los otros locales de la plaza, aunque con una tarta de queso digna de ser probada

En definitiva, la Plaza de Olavide es uno de los puntos neurálgicos del distrito de Chamberí, un hervidero los fines de semana y una elección casi inmejorable para disfrutar de unas cañas y algo de comer.

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