IKARO: Un restaurante con estrella Michelin, que logró una extraordinaria fusión entre comida típica ecuatoriana y riojana
“Coliflor confitada”, “Bacalao a la riojana» “Molleja de ternera”, “Espuma de coco” y “Homenaje al cacao ecuatoriano”, son algunos de los platillos que ofrece IKARO, un restaurante que nació a partir de la unión de los chefs Carolina Sánchez e Iñaki Murua, quienes hicieron realidad su proyecto gastronómico.
El sueño empezó hace siete años, cuando la chef ecuatoriana Carolina Sánchez realizó un máster en San Sebastián, donde conoció y se enamoró del español Iñaki Murua.
Juntos pensaron en crear un restaurante que logre una fusión y sobre todo demuestre la riqueza de la gastronomía ecuatoriana y española.
Ikaro es un restaurante que abrió sus puertas hace dos años y medio, sin embargo, a tan sólo un año de creación, la Guía Michelin les otorgo una estrella, que como es de conocimiento general, se trata de un reconocimiento a los establecimientos que cumplen con altos estándares de calidad, creatividad y cuidado con los platos que sirven a los comensales.
Carolina nos cuenta que su restaurante ofrece cocina de alta calidad en pequeños bocados, con el fin de ofrecer la mejor experiencia para el paladar, con la fusión de la gastronomía ecuatoriana y vasca/riojana.
La acogida por sus clientes ha sido muy positiva, pues cada tres meses crean una nueva carta que incluye recetas con ingredientes tradicionales y autóctonos como el tamarindo, la naranjilla, la merluza, la codorniz, la rubia gallega, las castañas, el cacao, entre otros.
Los chefs realizan una investigación de las regiones de Ecuador, así como de las distintas ciudades de España, tanto de los ingredientes autóctonos como de sus platos típicos para crear el menú, lo que hace de IKARO un restaurante único y original.
Carolina es actualmente jurado en el reconocido reality “Masterchef Ecuador”, y confiesa que esa experiencia la ha enriquecido como persona y profesional. Gracias a ese espacio, sus fans ecuatorianos la han visitado en su restaurante, que se encuentra en la ciudad de Logroño.
“Me gusta que la gente se atreva a probar sabores que no han probado en su vida y les interese la cultura gastronómica ecuatoriana”, finaliza Carolina.
