Victoria Martín presenta su primer libro, “Se tiene que morir mucha gente”

La cómica y guionista Victoria Martín, especialmente conocida por el podcast “Estirando el chicle”, presentó en el Pequeño Teatro de Gran Vía su primer libro “Se tiene que morir mucha gente”. Una obra que cuenta la evolución de cuatro amigas en los 30 que “tendrán que enfrentarse a una vida que no es la que esperaban

El pasado miércoles 19, cientos de personas volvieron a guardar cola en la Gran Vía madrileña a pesar de la repentina llegada del clima otoñal, y el viento y lluvia que traería consigo. Una fila que comenzaba en la entrada del Pequeño Teatro, y que poco antes de que comenzara el evento, recorrería toda manzana, despertado así la curiosidad de algunos viandantes que se acercaban a preguntar “¿disculpad, para qué estáis haciendo cola?”. Había sido la actriz-guionista, Victoria Martín, @livingpostureo en Instagram, quien les citó a través de redes sociales a una charla en la que participaría también su eterna compañera de proyectos y copresentadora de “Estirando el chicle”, Carolina Iglesias, con la promesa de la firma de ejemplares de su recién publicado libro “Se tiene que morir mucha gente” (Penguin Libros).

Unos minutos después de las 19:00 y con una sala llena, a la que los fans más rezagados no pudieron acceder, las dos presentadoras de “Estirando el Chicle” saldrían al escenario provocando una ovación de cerca de las 300 personas que esa tarde ocupaban el teatro. Junto a ellas se encontraba Cristina Lomba, editora de Penguin House, quien se encargó de dar comienzo al evento con un pequeño discurso inevitablemente interrumpido por el humor faltón de la recién publicada escritora como escape al sentimentalismo. El germen de “Se tiene que morir mucha gente” se remonta a abril de 2020, “antes de que fuera famosa”, bromean Carolina y Victoria. Como confesará esta última más adelante, la idea del libro surge a partir del guion que elaboró para una serie que finalmente no siguió adelante, obligándole a empezar de cero y reinventar la trama en forma de libro.

Lomba lograría finalizar su intervención destacando que los dos años y medio en los que estuvo colaborando con Martín se podrían resumir con las palabras “esfuerzo, trabajo y pasión”. Una gran dedicación que ha permitido que salga a luz una novela, que al igual que su escritora, se caracteriza por ser “divertida, ácida, inteligente y tierna” concluye. Y es que, “Se tiene que morir mucha gente” narra siguiendo el irónico sentido del humor de la cómica madrileña, las vivencias del grupo de amigas de Bárbara, asistente de guion en un programa de entretenimiento, adicta a los ansiolíticos y obsesionada con el dinero, formado por Maca, aspirante a actriz sin mucho éxito, Elena, antigua compañera de colegio en la recta final de su embarazado, que decide abandonar su marido y mudarse con Barbara y Maca, y finalmente Fabiola, una influencer inestable. Cuatro amigas que se tienen que enfrentar a una vida que no es la que esperaban.

Tras estas primeras palabras, Carolina y Victoria se quedaron solas en el escenario del Pequeño Teatro, comenzando así el coloquio sobre el libro, del que no podían evitar desviarse de vez en cuando. Siguiendo su dinámica, bromearon sobre lo cansadas que están una de la otra. Son muchos los proyectos que les unen. De forma paralela a la grabación del podcast con millones de oyentes y dos premio ondas, durante este año se embarcaron en la gira de un show junto a las colaboradoras del programa que recorrió toda España, finalizando con un sold out en el Wizink Center, que confiesan no haber superado.  Bromas aparte, Carolina sentenciaría “quiero estar en uno de los días más importante de tu vida”.

Vuelta al libro, Carolina pasaría a preguntar sobre el proceso de escritura. “Quería que fuera implacable” asegura la cómica madrileña sobre las correcciones de su editora, confesando haber seguido sus sugerencias: “en la mayoría de los casos (…), porque ver con perspectiva un libro (es complicado), (…), a veces te metes mucho en la historia y no tienes claro si todo está correcto, si lo has contado bien… entonces que haya alguien desde fuera que sepa desarrollar el contenido como ella (…) molaba un montón”. Victoria es una perfeccionista. Asegura que existen hasta 96 versiones del libro, ya que siguió incluyendo modificaciones prácticamente hasta que el escrito se mandó a la imprenta. “Dejarlo me costó mucho, pero cuando ya lo tienes es muy bonito”.

«Dejarlo me costó mucho, pero cuando ya lo tienes es muy bonito»

Victoria Martín, sobre la finalización del libro.

Era el turno de profundizar en los personajes. Martín cree que todos tienen algo de ella, “eso es muy de autora publicada eh, decir todos los personajes tienen algo de mi” bromeó Carolina, provocando de nuevo risas. Continúa asegurando que al igual que ella, “todos (los personajes) quieren que los quieran”.  Fijándose en su propia infancia, la autora reflexiona sobre cómo muchas veces crecer con las amigas del colegio, lleva a muchas personas a darse cuenta de que con el paso del tiempo dejan de tener cosas en común “Pero que a veces no importa no tener nada en común (…) A mi ese no me parece como motivo de separación de una amistad. (…) (En el libro) tres amigas se reencuentran y vuelven a estrechar esos lazos, que, a pesar del paso del tiempo, que es realmente lo único que tienen un común, siguen necesitándose las unas a las otras (…). Entonces me interesaba mucho porque creo que hay una parte de las relaciones de las mujeres que hemos denostado muchísimo, pero nosotras sabemos forjar lazos super potentes y creo que hay que aferrarse muchísimo a eso, porque creo que es muy guay y ellos no lo tienen (..) y creo que eso se ve en la historia”.

De regreso a un tono más desenfado, la cómica gallega reta a Victoria a elegir un posible elenco en caso de que el libro se llevase a la pantalla… “¿y quién sería Kiko Matamoros?” finaliza la pregunta. -“El novio de Elena”- Responde Victoria sin vacilar. Más adelante confesará su admiración por Alba Flores, quien le haría especial ilusión que asumiera el papel de protagonista, “aunque probablemente lo acabaría interpretando nisu”.

(En el libro) tres amigas se reencuentran y vuelven a estrechar esos lazos, que, a pesar del paso del tiempo, que es realmente lo único que tienen un común, siguen necesitándose las unas a las otras

Victoria Martín

Una vez más, la fina línea que separa a Victoria del personaje que ha creado, se difumina tras asegurar que no comenzó a escribir el libro por dinero, provocando una nueva carcajada de los asistentes. “Papá di algo” apela a su padre, que permanecía junto a familiares y amigos en las primeras filas. Recomponiéndose comenta qué desearía que la gente experimentara al leer el libro “me gustaría que la gente realmente se despoje de la culpa, se ría (…) creo que me gustaría que la gente se llevara pues esa parte de mi (…) y no sé, que les llegara de alguna manera… Y si no os gusta pues no me lo digáis de verdad”

Confiesa sentirse algo cohibida, ya que en definitiva publicar un libro que tiene tanto de ella supone exponerse ante mucha gente, sin embargo, parece en paz “hemos llegado hasta aquí, y espero que la gente lo disfrute”. El final del coloquio coincide con una nueva vista atrás, esta vez a su infancia. La publicación de este libro supone cumplir un sueño. De pequeña siempre quiso dedicarse a esto. “¿Qué diría al ver que su sueño se ha cumplido?” Pregunta Carolina, -“ Yo creo que se quedaría flipando”.

Tras una emotiva despedida entre las dos copresentadoras y un sincero agradecimiento al público, llegó el turno de la firma de libros. Más de la mitad de los asistentes habían adquirido su ejemplar en el momento y esperaban pacientemente su turno. Una firma de libros que llegará también a ciudades como Valencia, Barcelona, Sevilla, Zaragoza y Bilbao, embarcando así a Victoria en un nueva aventura, que complementará con su nuevo podcast “Malas Personas”.