La Castellana contará con carril bici para el 2022
El carril bici de la Castellana fue una de las medidas acordadas en los Acuerdos de la Villa, que se firmaron en julio de 2020, y sus obras empezarán a finales de año. El tramo más largo (2,2 km) del futuro carril bici irá desde plaza de Castilla hasta la calle Raimundo Fernández Villaverde y es esa parte por la que empezarán las obras que dotarán de vida el Paseo de la Castellana.
Las obras de ese primer tramo, que comienzan este mismo diciembre, tendrán una duración de doce meses, por lo que se podrá disfrutar de ese primer trozo de carril a finales del 2022. A partir de entonces se empezarán a construir los cinco tramos que restan hasta llegar a Atocha, sumando así 13 kilómetros, seis y medio en cada uno de los sentidos.
El primero de esos cinco tramos estará compuesto por 500 metros entre la calle Raimundo Fernández Villaverde y la plaza de San Juan de la Cruz. El siguiente por 800 metros entre esa última plaza y la glorieta de Emilio Castelar. El tercero por un kilómetro entre Emilio Castelar y la plaza de Colón, seguido de 800 metros desde Colón hasta la plaza de Cibeles. Por último, 1,3 kilómetros unirán la Cibeles y la glorieta del Emperador Carlos V en Atocha.
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid autorizó el contrato, casi de 600.000 euros (596.819,53€), para iniciar los trabajos.
Según se declara en el informe municipal, con la construcción de este carril bici se reducirán las emisiones ya que disminuirán los viajes en coche o moto mientras que aumentarán los desplazamientos en bicicleta. El mismo Ayuntamiento ha recordado que este proyecto se recoge en la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360 como una medida clave para promover la movilidad ciclista, peatonal y el fomento del transporte público.
Además, según los cálculos realizados por el área de Medio Ambiente y Movilidad, el futuro carril bici de Castellana hará que se incrementen hasta 4.000 los viajes diarios en bicicleta, mientras que actualmente no se contabilizan más de 3.000. También se estima que hasta 1.400 viajes diarios que hoy se hacen en moto o coche, se hagan en bicicleta una vez en carril esté terminado.
De igual modo, el espacio por el que los vehículos circulan no se verá perjudicado. “La obra implicará la reordenación de la vía lateral, sin afectar al bulevar ni a los carriles bus y a la vía central, minimizando el impacto sobre el diseño y el tráfico actual, de modo que el proyecto mantiene inalterada la capacidad circulatoria existente” explicó Inmaculada Sanz, la portavoz del Ayuntamiento de Madrid.
