David Fenoy: “Hay que luchar por la música o acabará muriendo”
Al cantautor asturiano David Fenoy (Oviedo, 1979) la crisis que atraviesa el mundo de la música no lo detiene y continúa con la promoción de «Chica del Norte», su primer disco en solitario.
ANA URÍA: ¿Cómo empezaste en el mundo de la música?
DAVID FENOY: A los catorce años, cuando encontré una guitarra en un armario en la casa de mi familia. Estaba sin cuerdas. La cogí, la arreglé y empecé a tocar. Primero, canciones de Antonio Vega y enseguida empecé a componer mis propios temas.
A.U: ¿Qué edad tenías?
D.F: Catorce, dieciséis años… Pero tampoco componía mucho de aquella y muchas de esas canciones quedaron en el olvido. Todavía ahora, cuando las veo, cuando leo las letras, me hacen gracia.
Luego hice un parón, y hace cosa de cinco años empecé a retomar lo de hacer conciertos y decidí grabar un disco, porque si no tienes un disco, una carta de presentación, parece que no tienes nada. Recuerdo que en Oviedo antes la gente iba a ver conciertos sin saber quién era el que actuaba. Ahora eso se ha terminado.
A.U: ¿Dónde se grabó este trabajo, «Chica del Norte»? ¿Dirigido a alguien?
D. F: El disco se grabó en estudios Magoo y sí tiene una dedicatoria especial pero que jamás diré. Eso es un secreto que irá conmigo a la tumba.
A.U: ¿Qué es lo que intentas transmitir con tus canciones?
D. F: Lo cierto es que las canciones son bastante personales. No es que sea justo lo que he vivido, pero son momentos de mi vida en los que he sentido lo que expreso en ellas.
A.U: Tu música es una mezcla entre pop, rock y cantautor, ¿Cómo te ves cuando te subes a los escenarios?
D. F: Donde más cómodo estoy es en acústico, solo o con una guitarra más. Es más íntimo y como más expresas.
A.U: Y el futuro de la música, ¿Cómo lo ves?
D. F: Bastante negro, pero aunque sea difícil creo que hay que invertir tiempo y dinero. Lo más importante es que la gente se conciencie de que la música es una profesión, de que hay que pagar por los conciertos, comprar discos. La gente debe luchar un poco por la música porque de no hacerlo, se acabará muriendo.
